Acaba de conocerse la muerte el pasado día 26 de Jack Vance. Autor de novelas de misterio, fantasía y sobre todo de ciencia ficción, Vance será recordado por series como La Tierra Moribunda, Lyonesse, Los Príncipes Demonio, Las Crónicas de Cadwall, El Planeta de la Aventura, Los Hombres Libres, El Cúmulo de Alastor o Los Tschai (todas ellas traducidas en su día al castellano), junto a buen número de novelas independientes como Maske: Taeria o Lámparas de Noche. Su estilo inimitable a la hora de narrar y su capacidad para crear y describir mundos y culturas alienígenas lo elevaron a la categoría de Gran Maestro de la Ciencia Ficción. Sus obras además destilan un particular sentido del humor, con personajes irrepetibles como el insuperable Unspiek, Barón de Bodissey, el único ser humano excomulgado de la Humanidad por su monumental Vida, obra filosofico-antropológica en doce volúmenes, o el conáctico Oman Ursht, gobernante del Cúmulo de Alastor, que cruza sus dominios disfrazado para conocer la verdad sobre sus súbditos.
Descansa en paz, Maestro. Y gracias por tantas horas de maravillosas lecturas.