Como bien sabrán los incondicionales de William Gibson (entre los que yo me cuento), el autor siempre ha ambientado sus obras con una ambientación rica en miles de detalles, muchos de ellos extrapolaciones de hechos reales. En Mundo espejo, su penúltima novela, Gibson hacía referencia a una serie de modelos de la firma Buzz Rickson, uno de los fabricantes más importantes de cazadoras estilo Segunda Guerra. El libro mencionaba un modelo que no existía como "pieza de culto" buscadísima. En cinco años Buzz Rickson ha recibido tantos pedidos del inexistente modelo que se ha decidido fabricarlo como parte de la William Gibson Collection. Además de varios modelos de la cazadora N1, Buzz Rickson ha diseñado para la marca japonesa Porter una serie de bolsas y maletas de portátil que se engloban en la misma colección.
Fuente: BoingBoing.
Para ver la colección de cazadoras: Buzz Rickson.
Para ver las maletas: Porter.
Fuente: BoingBoing.
Para ver la colección de cazadoras: Buzz Rickson.
Para ver las maletas: Porter.
2 comentarios:
Esto me recuerda al Necronomicón y como alguno gente lo solicitaba en librerías y bibliotecas: Necronomicón: Ficción verosímil.
No es la primera vez que pasa algo parecido , en Italia se pedía el "cacao maravillao" que era un producto falso que anunciaban en Tele 5 y que luego el infame programa y las chicas que lo anunciaban fueron importadas a la piel de toro, y hay más casos que ahora no recuerdo
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