La Biblioteca de Vorbarr Sultana nació el 23 de enero de 2008 con la intención de los libros que me gustan, los que he terminado de leer hace poco y los que leí en su día. Con el paso del tiempo las entradas fueron creciendo en número y comencé a hablar de noticias, concursos y demás temas del mundo literario. En una ocasión sirvió como plataforma de publicitar mi primera (y hasta ahora única) novela.
Pero ni siquiera con la ayuda de Ms.Delphine (cuya vocación editorial y conocimiento del mundillo fueron un soplo de aire fresco) ha conseguido que poco a poco mi interés por esta biblioteca se marchite.
Estos últimos años han sido difíciles, y eso se ha notado en los altibajos.
Otras veces he dicho que cerraba para luego regresar, pero esta vez es definitivo. No hay ningún factor que me obligue a tomar esta decisión. Simplemente este blog se ha convertido en una mera sombra, otro de tantos miles de fantasmas que pueblan el ciberespacio.
Sí, prefiero decir ciberespacio a la Nube, aunque sea por mi devoción hacia la prosa del maestro William Gibson. Como no podía ser de otro modo, fue Neuromante, la ópera prima de Gibson la que abiró este blog, la primera de 294 entradas incluyendo ésta.
Debo dar las gracias a Ms.Delphine por su apoyo, su ayuda, sus consejos y su infinita paciencia, y a mi clon malvado International Khiladi, el mejor hermano que alguien podría desear.
Como cierre os dejo unos versos de la poeta Berna Wang, una de mis autoras favoritas.
Escribo versos igual que anoto las cosas que tengo hacer en la agenda:
para sacármelos de la cabeza
(del corazón)
y poder seguir caminando sin peso.
Adiós y gracias por habernos leído.
Pero ni siquiera con la ayuda de Ms.Delphine (cuya vocación editorial y conocimiento del mundillo fueron un soplo de aire fresco) ha conseguido que poco a poco mi interés por esta biblioteca se marchite.
Estos últimos años han sido difíciles, y eso se ha notado en los altibajos.
Otras veces he dicho que cerraba para luego regresar, pero esta vez es definitivo. No hay ningún factor que me obligue a tomar esta decisión. Simplemente este blog se ha convertido en una mera sombra, otro de tantos miles de fantasmas que pueblan el ciberespacio.
Sí, prefiero decir ciberespacio a la Nube, aunque sea por mi devoción hacia la prosa del maestro William Gibson. Como no podía ser de otro modo, fue Neuromante, la ópera prima de Gibson la que abiró este blog, la primera de 294 entradas incluyendo ésta.
Debo dar las gracias a Ms.Delphine por su apoyo, su ayuda, sus consejos y su infinita paciencia, y a mi clon malvado International Khiladi, el mejor hermano que alguien podría desear.
Como cierre os dejo unos versos de la poeta Berna Wang, una de mis autoras favoritas.
Escribo versos igual que anoto las cosas que tengo hacer en la agenda:
para sacármelos de la cabeza
(del corazón)
y poder seguir caminando sin peso.
Adiós y gracias por habernos leído.